Friday, January 31, 2014
La relevancia del señor Holmes
El 23 de diciembre del año pasado el
juez norteamericano Rubén Castillo, al resolver sobre la demanda entablada por
Leslie S. Klinger contra la Sucesión de Conan Doyle, decidió en forma sumaria
que los personajes, historias y detalles contenidos en las novelas y cuentos de
Sherlock Holmes publicadas en los Estados Unidos antes de 1923 son del dominio
público. Esto significa que de las cuatro novelas y cincuenta y seis cuentos
escritos por Sir Arthur Conan Doyle, sólo diez historias siguen bajo la
protección de la ley de derechos de autor de ese país. En el Reino Unido todas
las narraciones de Sherlock Holmes son del dominio público.
Leslie S. Klinger es un abogado nacido
en Chicago, editor de los tres tomos de Sherlock
Holmes Anotado publicada en español por Ediciones Akal de Madrid. También
es el editor de A study in Sherlock,
una serie de historias nuevas basadas en el detective, y de la obra que sin haber sido publicada
todavía, dio origen a la disputa con la Sucesión de Conan Doyle: In the Company of Sherlock Holmes.
La decisión del juez Castillo es
importante no sólo porque define con claridad los límites de aquello que forma
parte del dominio público y aquello que está protegido por los derechos de
autor en la narrativa canónica del inquilino de Baker Street, sino porque se da
en un momento en el cual Holmes y Watson viven una especie de renacimiento en
los medios de comunicación.
En 2009 Warner Brothers realizó una
exitosa película dirigida por Guy Ritchie y protagonizada por Robert Downey Jr
como Holmes y Jude Law como Watson. La cinta, ubicada en la época victoriana y
apoyada con sólidas actuaciones además de efectos hiperrealistas ganó 523
millones de dólares y dio origen a una secuela en 2011 y ya se habla de una
tercera entrega.
La BBC empezó a transmitir en 2010 la
serie de televisión Sherlock, creada
por las mentes detrás de Doctor Who,
Steven Moffat y Mark Gatiss, y protagonizada por Benedict Cumberbatch como
Holmes y Martin Freeman como Watson. Cada temporada consta de tres capítulos de
una hora y media, aproximadamente, que se basan en la obra de Conan Doyle pero
presentan a los héroes en el Londres contemporáneo con enorme acierto. La
tercera temporada de esta serie empezó a transmitirse el primero de enero y
este mismo domingo 5 saldrá al aire el segundo capítulo. El primer episodio de
este año tuvo una audiencia, sólo en el Reino Unido, de 9.5 millones de
espectadores.
En los EE.UU. la cadena de televisión
CBS inició en 2012 la transmisión de Elementary,
protagonizada por Jonny Lee Miller como Holmes y Lucy Liu como Watson. La serie
que ubica a los detectives en Nueva York en la época actual fue creada por
Robert Doherty y tiene a la fecha dos temporadas. En su momento más exitoso
logró captar la atención de 20.8 millones de tele-espectadores sólo en los
Estados Unidos.
Sherlock Holmes apareció por primera vez
en 1887 en la novela Estudio en Escarlata
y desde entonces ha gozado de una popularidad permanente. A punto de cumplir
127 años ¿por qué sigue siendo relevante para nosotros el señor Holmes?
No fue el primer detective de la
literatura, ese honor correspondió a Auguste Dupin, creación de Edgar Allan
Poe. No es un héroe de acción vertiginosa como el Elvis Cole de Robert Crais o
el ex policía Charlie Parker de John Connolly. No es tan empático como
Wallander de Henning Mankell, ni tan simpático como Kostas Jaritos de Petros Márkaris.
Tampoco es tan poético como el inspector jefe Chen Cao de Qiu Xiaolong.
Holmes resume la aspiración de las
virtudes intelectuales del ser humano y las lleva a la perfección en el arte de
la investigación. Pero no sólo es un ente de cualidades de inteligencia, además
es un experto pugilista, aficionado al violín y, originalmente, morfinómano. La
superioridad intelectual lo hace arrogante, en especial frente a los policías
de Scotland Yard, y eso hace del doctor John Watson el intérprete de sus aventuras,
para que, junto con él nos maravillemos de sus dotes racionales.
Sherlock significa el triunfo del
ingenio, de la astucia. Su existencia reafirma nuestra humana convicción de que
la realidad se domina si se aplica a ello la mente racional. Cuando el
detective triunfa lo hace a nombre de todos nosotros y derrota a quienes
pretenden hacer el mal mediante el crimen. Sherlock reestablece el status quo mediante razonamientos
deductivos e inductivos. En nuestro mundo cotidiano lleno de violencia
inexplicable e incontrolable, Sherlock Holmes nos demuestra que la inteligencia
es el camino.
Elemental ¿verdad mi querido paisano?
Labels: Arthur Conan Doyle, John Watson, Sherlock Holmes